"La lealtad es una calle de doble sentido.
Si te la pido a ti, tú la tendrás de mi parte".
Cuando hace unos años alguien me recomendó ver una serie de abogados titulada "trajes" contesté con ese típico "si eso cuando acabe de ver la serie que estoy siguiendo ahora". ¡Como si no pudiese ver dos o tres series a la vez! No fue hasta que en una clase de guion me hicieron leer el capitulo piloto de Suits cuando pensé que quizá debería darle una oportunidad. Nada más empezar a leerlo pensé que a pesar de ser una serie bastante coral había un personaje que resaltaba entre todos los demás por la fuerza y el contraste que dejaba entrever.
Mi primer encuentro con Harvey Specter no fue del todo agradable. No soy muy amiga de las personas excesivamente ambiciosas, mucho menos si están metidas en un ambiente competitivo. Harvey desde el primer momento se presentó como ese tipo al que no le importa saltarse las reglas para conseguir lo que quiere. Un hombre de éxito a costa de lo que haga falta.
Sin embargo, no tardé mucho en darme cuenta de que había algo que no encajaba en esa imagen de hombre de negocios sin sentimientos. ¡Tenía valores! Sí, era leal y se preocupaba por las personas aunque esto último intentara esconderlo. Aunque por un lado tenemos a Harvey, un abogado imparable que sabe como manipular a las personas para conseguir todo lo que quiere. Por otro lado tenemos a un Harvey que actúa, como si fuera una capa interior de la primera, poniendo por delante del éxito profesional su propia ética. Aún así, desde fuera la imagen que prevalecerá será la primera. A raíz de este descubrimiento Harvey se convirtió para mí en un enigma. ¿Qué le había pasado para configurar un carácter tan fuerte y contradictorio?
Como dice Linda Seger en su libro Cómo crear personajes inolvidables muchas veces son los acontecimientos que le ocurren al personaje antes de que empiece la historia lo que configura su carácter. En este caso concreto la historia de cómo la madre de Harvey le traiciona acostándose con otros hombres mientras su padre está fuera supone un punto de inflexión en su vida y define unas pautas muy marcadas en su comportamiento.
Este momento de su vida hace que el valor más fuerte de este abogado sea la lealtad. Lo que más valora de las personas es que le sean fieles, Sin embargo, debido a la temprana traición de su madre le cuesta confiar en ellas. Así, tenemos a una persona que se come el mundo en el terreno profesional pero que fracasa en lo personal. Es incapaz de mantener una relación debido a sus propios miedos a pesar de tener mucho carisma y facilidad para conquistar a las mujeres.
En lo profesional, cuando se compromete con un cliente, se compromete, Aquí se fía más del pacto "si yo te soy fiel, tú me debes lealtad". Es capaz de saltarse la línea que separa lo legal de lo ilegal con tal de mantener esa promesa. "La lealtad lo vale todo" parece que quiere decir.
Podemos decir que lo que parece que da fuerza a este personaje es ese contraste entre la imagen de chico duro al que nada ni nadie le importa y los valores que tiene. A medida que avanza la serie y le vamos conociendo mejor, nos damos cuenta de cómo se preocupa por algunos personajes como Donna o Mike a pesar de que no lo deje ver. Poco a poco la fuerza del personaje hace que nos encontremos con la humanidad de Harvey y nos preguntemos, ¿algún día dejará caer esa barrera? Y sí la deja caer, ¿seguirá siendo Harvey, el abogado imbatible?
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